La escuadras de Junior y Barranquilla sellaron un empate 2-2 la noche de este miércoles en el estadio Metropolitano, en un duelo donde los rojiblancos debieron emplearse a fondo para conseguir igualar la balanza tras ir la mayor parte de las acciones por debajo del marcador.

Junior volvió a citarse en el estadio Metropolitano con el ánimo de una victoria. Pero sobre todo con el duro rasero de los aficionados que tuvieron la oportunidad de observar el enfrentamiento ante el Barranquilla por la televisión, una circunstancia realmente rara.

La afición esperaba ver que tenían para ofrecer jugadores con poca continuidad desde la llegada de Julio Comesaña, como son los casos de Héctor Quiñones, Rafael Carrascal, Lewis Ochoa, Léiner Escalante o Sebastián Hernández.

Sin embargo, durante buena parte del primer tiempo Junior mantuvo la posesión de la pelota pero sin llegar a generar peligro real en el arco del cuadro ‘ñero’.

Por otra parte, los juveniles del Barranquilla, elenco que por calendario oficiaba como local, salieron al campo de juego llenos de la motivación de demostrar que tienen los suficientes argumentos para ser promovidos al equipo de la ‘A’.

Por eso, conforme a cada minuto que pasaba iban pisando con más confianza el campo del conjunto ‘tiburón’. Todo parecía indicar que solo era cuestión de tiempo para que llegase el primer tanto del cuadro ‘Quillero’.

Y así fue: el primer tanto de las acciones fue obra del atacante Juan Herrera a los 24, tras un cobro de pelota quieta desde la derecha. La esférica fue enviada con precisión al segundo poste donde Herrera se lanzó en palomita para conectar el frentazo y batir la red defendida por José Luis Chunga, que hasta ese momento sólo había sido un espectador.

El gol fue un tónico para la confianza de los benjamines del Barranquilla, que de allí en más tomaron la iniciativa hasta finalizada la primera mitad. Al final, los equipos se fueron a los camerinos con realidades distintas.

Mientras que el Barranquilla no hizo cambios para la segunda mitad, el profesor Arturo Reyes se mostró conforme con el papel de sus dirigidos. De otro lado, Julio Comesaña ordenó la variante de Héctor Quiñones quien salió para dejarle su puesto al juvenil Iván Morales.

La segunda mitad trajo con ella apenas unas cuantas emociones. En el inicio del complemento apenas hubo una tímida reacción de Junior, mientras que por otro lado Barranquilla terminó teniendo la pelota pero sin la contundencia para definir en el arco rival.

Justo cuando parecía que las cosas se las llevaría el ‘hermano menor, Junior sacó a relucir el peso de su escudo y en cuestión de un minuto logró voltear el marcador. Primero, con un soberbio tiro desde fuera del área de Jonathan Ávila que disparó para vencer la meta ñera, a los 73.

Tres minutos después, Bernardo Cuesta empalmó una volea desde fuera del área y bañó al portero Sergio Pabón que nada pudo hacer para evitar que el tiro se fundiera en las redes, a los 76 minutos.

Sin embargo el conjunto currambero supo asimilar el golpe y fácilmente superó los dos goles en poco tiempo para volver a colocar la paridad en el marcador, gracias a un tanto de Homer Martínez, quien  pescó un rebote en el tiro de esquina para colocar el 2-2.

Así las cosas, transcurrieron emotivos los minutos finales del partido. Con un intenso intercambio ofensivas, pero que al final terminó con la igualdad en el marcador.

Al final, Junior prolongó una nueva jornada su invicto en Copa Águila, sumando 10 unidades. De otro lado Barranquilla llegó a 5 puntos y se acomodó en la segunda casilla del grupo, a falta de una jornada.